Una miel con aroma a cocido y caramelo, café en polvo, manzanilla, cúrcuma, azafrán y mermelada de albaricoque. En boca es generoso, complejo, en perfecto equilibrio entre aromas a toffe, tamarindo y un final ligeramente más amargo.
Cómo usarlo
Va muy bien con canela y nuez moscada, pero también con anís y guindilla. Lo recomendamos para mostazas y mermeladas inusuales; servido solo, va perfecto con guanciale y cotechino.
Se puede utilizar como base para la fermentación alcohólica: en cervezas de baja fermentación, hidromiel y en infusiones de hierbas amargas para destilados. Pruébalo con arroz salteado o con pollo al curry, en un mix de embutidos como el cotechino.